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La insignia
13 de abril del 2001


Pintura

Antonio Berni: El artista que traduce nuestro presente


Mariana Montenegro
El Espejo de Argentina y el Mundo. Argentina, abril del 2001.


Antonio Berni: el realismo social que se refleja en sus obras lo convierte en un artista eminentemente político. Hace más de 30 años que anticipó el proceso de marginación social que atraviesa Argentina. Sus cuadros, "Desocupados" y "Manifestación", reflejan la realidad sociopolítica de hoy.


No hay una exhibición de sus obras en ningún museo por estos días ni donaciones de sus pinturas. Lo que sí hay es un claro reflejo de la triste realidad socio-política que desde la década del 30 Antonio Berni viene mostrando a través de sus obras, y que a pesar de haber pasado más de 70 años la situación social del país sigue siendo la misma.

Berni fue un artista político. "Pienso que la lectura política de mi obra es fundamental, que no se la puede dejar de lado, y que si se la deja, no puede ser comprendida a fondo", decía el pintor. Es justamente ese costado crítico y político lo que adquiere una proyección especial en la Argentina de hoy.

No sólo su lectura de la realidad tiene profundos vínculos con el presente sino que más de una persona puede reconocerse en sus sugestivos personajes.

Hace más de 30 años que Berni anticipó el proceso de marginación social con sus consecuentes contrastes -los de arriba y los de abajo- y los transportó a sus obras. Con "Desocupados" (1934) y "Manifestación" (1934), Berni se convierte en uno los precursores del arte político en Argentina a través de sus cuestionamientos de las injusticias y las desigualdades sociales.


De Juanito Laguna a Ramona Montiel

El artista quiso crear con Juanito un arquetipo que representara a todos los chicos que conoció a principios de la década del 60 en un viaje que hizo por distintos pueblos de Santiago del Estero. Pero Juanito podría ser el hijo de uno de los "Desocupados" o el nieto de algún "Manifestante" al que le tocó vivir en la pobreza y la resignación. Para crear el personaje de Juanito utiliza tapitas, latas, y todo tipo de desechos que los de arriba tiran y que, sin embargo, la villa aprovecha.

En el mismo período, Berni hace aparecer en sus pinturas a otro personaje: Ramona Montiel, la chica que vivía en el mismo contexto social que Juanito y que vino a la gran ciudad en busca de un futuro mejor, pero se encuentra con una realidad distinta a la imaginada.

"Con Juanito y Ramona les puse nombre y apellido a una multitud de anónimos, desplazados, niños marginados, mujeres humilladas y los convertí en un símbolo. Los hice con los materiales en que se desenvolvían sus aventuras. La triste vulgaridad de lo cotidiano, la ilusión de lo bello reemplazada por un objeto de consumo", escribía Berni.


El creador del realismo social

Antonio Berni nació en Rosario en 1905 en el seno de una familia que nada tenía que ver con el mundo artístico. Su padre se había desempeñado como sastre y su madre trabajaba en la chacra de sus parientes.

En ese contexto fue donde adquirió la sensibilidad suficiente para reflejar la otra cara de del país, que muchos intelectuales y artistas preferían evadir.

Durante los años 30, de crisis y revolución, Berni aborda en sus restropectivas temas como la miseria humana y el maltrato social. Sus obras adquieren un mayor grado de sensibilidad, a tal punto de impregnar sus pinturas en denuncias de injusticia social. La desocupación, la pobreza y el comienzo de los regímenes dictatoriales espantan a Berni. Se aproxima a la realidad histórica para detenerse en los acontecimientos que proclaman los derechos del hombre.

Es así como inaugura el Realismo Social. "El artista está obligado a vivir con los ojos abiertos. En la década del 30, la dictadura, la desocupación, el hambre y las ollas populares creaban una tremenda realidad que rompían los ojos", diría el artista por el año 1976.

Si bien hoy la sociedad ya no está sometida a un régimen militar, está martirizada y oprimida a un régimen económico, que de a poco la va consumiendo. "Masacre" (1948) y "El obrero muerto" (1949) son cuadros que reflejan claramente la barbarie del país.


Los excesos de la realidad

A través de su amplia obra, Berni intenta resaltar una historia en la que el espectador deja de ser un simple observador para convertirse en el protagonista de una realidad que lo excede y lo supera.

La intencionalidad ideológica que aparece en sus cuadros lo convierten en un artista de la cultura popular. Materializa las denuncias y las injusticias de los más necesitados e impone el valor de la imagen como una provocación: alterna lo real cotidiano con lo real material.

Percibir, pensar y mirar los Juanitos y las Ramonas de Berni es poder reflexionar sobre la Argentina de hoy.



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