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| 6 de marzo del 2006 |
Lectorio LXIII: El III Reich
Ariel Ruiz Mondragón
Amery, Carl. Auschwitz, ¿comienza el siglo XXI? Hitler como precursor. Traducción de Cristina García Ohlrich. Madrid, Turner, Fondo de Cultura Económica, 2002. 183 p. (Col. Noema, 15). Dentro de la historia prohijada por los ideales de la Ilustración, de la idea de progreso y de la autoconciencia atlántica, no acaban de encajar personajes y hechos como Adolf Hitler y el Tercer Reich, ya que éstos significan "una crasa negación de la racionalidad o de la interpretabilidad del propio proceso histórico". Por esto es que, para Amery, el hitlerismo no es un acontecimiento histórico, sino más bien un fenómeno natural (más cercano a una catástrofe, habría que añadir). Sin embargo, el nazismo planteaba una propuesta de futuro en la que se pretendió dar respuesta a un dilema clave de la humanidad: "las condiciones que requiere la continuidad de nuestra especie en un planeta limitado". Hitler aportó su cruel e inhumana respuesta en su doctrina y en su puesta en práctica, que son, a pesar nuestro, una oferta de elementos de futuro. En este escrito de combate, Amery se plantea una interrogante grave: ¿acaso arroja Adolf Hitler, o, más bien, acaso arroja el gran plan de Hitler, desarrollado entre 1920 y los terribles acontecimientos ocurridos entre la guerra oriental y la Shoah, sombras de futuras posibilidades? En otras palabras: ¿fue Hitler un precursor?
Contenido:
Burleigh, Michael. El Tercer Reich. Una nueva historia. Traducción de José Manuel Álvarez Flórez. México, Taurus, 2005. 915 p. (Col. Taurus Historia). Entre las grandes historias contemporáneas de la Alemania nazi destaca esta nueva historia, en la que se relata ese "acontecimiento excepcionalmente terrible de la historia moderna". Enfocando al nazismo como una religión política, analiza el ascenso de tal doctrina y su líder desde la derrota que los alemanes sufrieron en la Primera Guerra Mundial y la decepción con la República de Weimar hasta su llegada al poder y la catástrofe humana que trajeron consigo. Para Burleigh su libro es "una crónica del desmoronamiento moral y la transformación a largo plazo, y más sutil, de una sociedad industrial avanzada, cuyas consecuencias fue capaz de predecir en parte antes de que nacieran en ella observadores astutos con un instinto para estas materias. Pero las masas, estimuladas por sectores irresponsables y egoístas de la elite, a los que el filósofo de la historia Eric Voegelin calificó memorablemente una vez como 'una chusma malvada', arremetieron contra la caridad, la razón y el escepticismo, depositando su fe en el personaje por demás ridículo de Hitler, cuya propia existencia miserable adquirió sentido cuando descubrió que su rabia contra el mundo era susceptible de una generalización indefinida".
Contenido:
Corella Torres, Norberto. Propaganda nazi. México, Universidad Autónoma de Baja California, H. Cámara de Diputados, LIX Legislatura, Miguel Ángel Porrúa, 2005. 19 p. (Col. Conocer para decidir). Uno de los elementos fundamentales para la elevación y consolidación del Tercer Reich lo fue, sin lugar a dudas, la propaganda diseñada y utilizada por los nazis. En este volumen se estudia el carácter general de esa propaganda entre 1930 y 1945, resaltando la obra de uno de los más siniestros a la vez que brillantes colaboradores de Adolf Hitler: Joseph Goebbels, ministro de Propaganda e Ilustración Pública del gobierno nacionasocialista. El trabajo propagandístico de este personaje fue, a decir del autor, el que inclinó la balanza para que Hitler tomara el poder. Esa propaganda (en la que, ante la pobreza ideológica del nazismo, se logró imponer la excitación sobre el razonamiento y la imagen sobre la argumentación) logró impulsar y sostener la manipulación de las masas, y estaba "destinada al control sobre una forma de vida".
Contenido:
Evans, Richard J. La llegada del Tercer Reich. El ascenso de los nazis al poder. Traducción de José Manuel Álvarez Flórez. Barcelona, Península, 2005. 669 p. (Col. Atalaya, 184). Hace 60 años que llegó a su fin el régimen nazi, y sin embargo sigue concitando el interés y la avidez por conocer por qué y cómo ocurrió ese desastroso episodio en la historia de la humanidad. Como una excelente introducción a la historia general del Tercer Reich, en este primer volumen de la trilogía que el autor dedica a ese acontecimiento se encarga del relato de los prolegómenos del nazismo (remontándose hasta lo que considera sus orígenes en el Imperio de Bismarck) hasta la ascensión de los nazis al poder mediante una combinación de éxito electoral y de violencia política generalizada en el seno de una sociedad lastimada y desencantada que vivía en una democracia en crisis. Libro dirigido a lectores que saben poco o nada del nazismo, en una espléndida crónica narrativa que busca exponer la historia del Tercer Reich "en orden cronológico y mostrar cómo una cosa llevo a otra." Sin duda entre sus aportes más valiosos están el intentar reproducir la forma de vida de los alemanes de la época, alejado de los juicios morales, religiosos o ético, los cuales, dice Evans, corresponden al lector.
Contenido:
Fest, Joachim. El hundimiento. Hitler y el final del Tercer Reich. Un bosquejo histórico. Traducción de Carmen Gauger. México, Galaxia Gutenberg Círculo de Lectores, 2005. 217 p. Tras el fracaso expansionista del nazismo alemán y debido al empuje imparable de los aliados, para 1945 la suerte de la Segunda Guerra Mundial ya estaba echada, por lo que sólo era cuestión de tiempo para que el imperio hitleriano viera su fin. Sin embargo sus estertores también están llenos de horror y dramatismo. En este volumen uno de los mayores biógrafos del Führer relata los días de la batalla final por una ciudad de Berlín asediada por las fuerzas soviéticas y las horas postreras de Hitler en su bunker. En estas páginas vemos a un dictador vencido, deprimido, aislado del mundo, dirigiendo ejércitos ya inexistentes y alucinando victoriosas batallas que nunca ocurrirían, procurando que su país se hundiera definitivamente con él. Como dice Fest este relato "debería hacer percibir el desconsuelo que produce tanto sinsentido, un desconsuelo que surge siempre que se contempla el incesante acontecer destructivo en que consiste la historia".
Contenido:
Gellately, Robert. La Gestapo y la sociedad alemana. La política racial nazi (1933-1945). Traducción de Tomás Fernández Aúz y Beatriz Eguibar. Barcelona, Paidós, 2004. 409 p. (Col. Paidós Historia Contemporánea, 014) . Una de las instituciones más temidas en Alemania durante el nazismo lo fue la policía secreta del Estado, la Geheime Staatspolizei, conocida popularmente como Gestapo. Hasta ahora se ha resaltado la forma en que ésta se dedicó a imponer la ideología y las políticas nazis, y a vigilar a los ciudadanos hasta en sus espacios más íntimos, politizando y convirtiendo en delitos cualquier signo que pudiera ser interpretado de oposición, especialmente si venía de grupos sociales que fueron marginados del nuevo orden político: judíos, marxistas, pacifistas, homosexuales, etc. Tomando como campo de estudio la ciudad de Wurzburgo y combinando en este libro la historia administrativa y social, el autor realiza un espléndido estudio de la interacción cotidiana entre la Gestapo, la sociedad alemana y la imposición de la política racial, y "se pregunta cuáles eran las preocupaciones de la Gestapo, cómo estaba organizada en el plano local, quién servía en ella, cómo desempeñaba sus tareas, y lo más importante, cómo iniciaba un caso".
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Goldensohn, Leon. Las entrevistas de Núremberg. Edición e introducción de Robert Gellately. Traducción de Teresa Carretero, Amado Diéguez Rodríguez y Miguel Martínez-Lage. México, Taurus, 2005. 590 p. Concluida la Segunda Guerra Mundial los Aliados, enterados perfectamente de las atrocidades cometidas por el nazismo y tras examinar diversas opciones que se presentaron (que iban desde la eliminación masiva hasta un proceso judicial), decidieron en la segunda mitad del 1945 iniciar un proceso en contra de los principales criminales de guerra alemanes, a quienes procesaron en Núremberg acusándolos de cuatro cargos: conjura, crímenes contra la paz, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, acusaciones que no tenían precedentes en la jurisprudencia internacional. En el transcurso del proceso fue necesario dar atención psicológica a los procesados nazis, y uno de los que tuvo esa responsabilidad fue Goldensohn, quien, además de verlos prácticamente a diario para vigilar su estado de salud, se dio a la tarea de hacerles entrevistas formales de las que tomaba notas extensas, las que quedaron guardadas durante muchos años en la colección privada del entrevistador. De allí fueron rescatadas para publicarlas por primera vez a finales del siglo pasado. Y, como queda claro, el horror sí sucedió y fue encabezado y perpetrado por hombres comunes y corrientes con una inteligencia superior a la media.
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Goldhagen, Daniel Jonah. Los verdugos voluntarios de Hitler. Los alemanes corrientes y el Holocausto. Traducción de Jordi Fibla. 4ª. ed. Madrid, Taurus, 2003. 725 p. (Col. Taurus Pensamiento). El Holocausto ha seguido siendo motivo de investigación, de nueva interpretaciones y de acalorados debates que intentan dar cuenta de tan terrible fenómeno. En ese sentido una de las obras que más ha levantado polémica en los últimos tiempos lo ha sido la del politólogo norteamericano Goldhagen. Este autor puso en el centro de su atención ya no las instituciones y las estructuras, sino más bien a los actores directos del drama, "los seres humanos que cometieron los crímenes y el pueblo al que pertenecían". De esa forma, este libro seminal "se fundamenta en la idea de que cada individuo estaba en condiciones de elegir el modo de tratar a los judíos. También toma en serio el verdadero contexto histórico en el que los genocidas alemanes desarrollaron las creencias y los valores en los que se basó su comprensión de lo que era correcto y necesario en el tratamiento de los judíos. Por todo ello, es necesario el mayor conocimiento posible de las opiniones que los genocidas alemanes tenían de sus víctimas y las decisiones que tomaron, así como las opiniones sobre los judíos generalizadas en su sociedad."
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Heller, Steven. La svástica, ¿Un símbolo más allá de la redención? Traducción de José María Fábregas Puig. México, Océano, 2005. 167 p. Uno de los símbolos más atractivos, célebres y fascinantes de la historia lo es la esvástica, especialmente después de ser adoptado y difundido por el nazismo hitleriano. Como anota el autor, ninguna otra marca es tan potente desde el punto de vista gráfico: "Al igual que los símbolos más eficaces, la pureza geométrica de la svástica permite la legibilidad sin importar el tamaño o la distancia y, sobre su eje, el cuadrado girado da la ilusión de movimiento". Este impactante símbolo tiene una larga historia que va mucho más allá de su pasado nazi y su actual significado de terror. Su trayectoria, dice Heller es múltiple: fue amuleto religioso, talismán oculto, símbolo científico, emblema de gremios, implemento meteorológico, marca comercial, ornamento arquitectónico, insignia militar, hasta terminar siendo el emblema de la Alemania nazi, usado hoy por múltiples grupos de odio. Aquí está contada esa historia.
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Kershaw, Ian. La dictadura nazi. Problemas y perspectivas de interpretación. Traducción de Julio Sierra. Buenos Aires, Siglo XXI de Argentina, 2004. 440 p. (Col. Historia y cultura, 9). Indudablemente el autor es uno de los mayores conocedores de Hitler y el nazismo, temas que empezó a trabajar hacia finales de los años setenta del siglo pasado. Desde entonces se interesó por la intensa discusión que se daba entre los historiadores para interpretar y comprender el régimen nazi tanto de forma global como en algunos de sus aspectos. De allí que escribiera esta que llama "una piéce d'occasion: una evaluación del punto alcanzado por la investigación histórica acerca del Tercer Reich en aquel momento". De esa forma, sin exentarnos de conocer sus propios puntos de vista, Kershaw hace una interesante exposición de los grandes debates historiográficos acerca del nazismo, como la disputa de los historiadores de los años ochenta y de la discusión acerca de los trabajos de Daniel Jonah Goldhagen, así como algunas consideraciones acerca de los cambios interpretativos que se podían dar con hechos tales como la unificación alemana, la aparición de fuentes inexploradas y la utilización de nuevos enfoques y métodos.
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Kershaw, Ian. El mito de Hitler. Imagen y realidad en el Tercer Reich. Traducción de Tomás Fernández Aúz y Beatriz Eguibar. Barcelona, Paidós, 2003. 374 p. (Paidós Historia Contemporánea, 013). En la constitución del Tercer Reich el papel central corrió a cargo de su protagonista principal: Adolf Hitler, quien fue la personificación de ese gobierno atroz. Su actuación fue un factor clave en el funcionamiento del régimen, ya que concitaba consensos en asuntos en los que el propio gobierno y el propio Partido Nacionalsocialista eran vistos negativamente. Ese carismático liderazgo fue una fuerza integradora del sistema de gobierno nazi, sin el cual no hubiera sido posible alcanzar el nivel de aclamación plebiscitaria que logró. En este libro Kershaw se centra "en el proceso de construcción de su imagen (de Hitler) a través de la propaganda, y sobre todo, en la percepción de esa imagen por parte del pueblo alemán -cómo veía éste a Hitler, antes de y durante el Tercer Reich-, o, para expresarlo de forma levemente distinta, se ocupa menos de lo que era Hitler en realidad que de lo que aparentaba ser para millones de alemanes."
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Koehn, Barbara. La resistencia alemana contra Hitler 1933-1945. Traducción de Florencia Peyrou. Madrid, Alianza Editorial, 2005. 375 p. (Col. Alianza Ensayo). Adolf Hitler fue un líder que gozó de una gran popularidad como se demostró en diversos episodios de su gobierno, en los que el pueblo alemán enseñó una gran devoción por su Führer. Sin embargo hubo grupos y sectores sociales que estuvieron en desacuerdo con el régimen nazi, los que ofrecieron resistencia al casi total dominio social que alcanzó aquel. Sin embargo, y pese a que desde 1933 lanzaron serias advertencias a las potencias occidentales sobre lo que significaba la dictadura hitleriana, fueron ignorados. Desde el año en que Hitler asumió el poder se formaron grupo opositores de izquierda y de derecha: comunistas, socialdemócratas, sindicalistas y las Iglesias. Sin embargo pronto su actividad se vio severamente limitada debido a las brutales condiciones de control político e ideológico impuesto por las policías y los servicios secretos nazis. Sin embargo, aquellos grupos mantuvieron su actividad en esa situación límite, y uno de ellos llegó a intentar un golpe de Estado el 20 de julio de 1944, el que, de haber triunfado, habría ahorrado todavía muchos sufrimientos al pueblo alemán.
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Koonz, Claudia. La conciencia nazi. La formación del fundamentalismo étnico del Tercer Reich. Traducción de Juanjo Estrella. Barcelona, Paidós, 2005. 409 p. (Col. Paidós Historia Contemporánea, 032). Pese a lo que se pudiera creer, en la Alemania nazi se estableció una conciencia, según la cual los ciudadanos del nacionalsocialismo podían actuar de acuerdo a su carácter nacional y a defender la superioridad de sus valores morales sobre los de otras naciones. Esto lo respaldaban los nazis con referencias a teorías biológicas presuntamente científicas que "comprobaban" su superioridad racial. Esa conciencia tenía cuatro presupuestos, dice la autora: la vida del Volk (el pueblo) es como la de un organismo con todas sus etapas, de la vida a la muerte; esa comunidad desarrolla valores adecuadas a su naturaleza y entorno; la agresión contra poblaciones indeseables y el derecho de un gobierno a anular la protección legal de ciudadanos asimilados sobre la base de lo que ese gobierno definía como su "etnicidad". De esa forma pudieron justificarse los numerosos crímenes que cometieron.
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Lukacs, John. El Hitler de la Historia. Juicio a los biógrafos de Hitler. Traducción de Saúl Martínez. Madrid, Turner, Fondo de Cultura Económica, 2003. 293 p. (Col. Noema, 25). Uno de los personajes más fascinantes, estudiados y biografiados de la historia lo ha sido el Führer Adolfo Hitler, sobre cuya sombría figura hay amplísimas bibliografía y hemerografía. En éstas se nos han presentado diversas visiones e interpretaciones acerca de la personalidad, la doctrina y la deplorable obra del dictador, las que no sólo han resultado distintas sino hasta contradictorias entre sí. Aquí no se hace una biografía, sino una revisión y examen de los trabajos biográficos dedicados a la figura de la cabeza del Tercer Reich, "es la historia de una historia: la historia de la evolución de nuestro conocimiento de Hitler, tal y como ésta se observa en los escritos de un amplio surtido de sus múltiples biógrafos". Así es como el autor emprende una profunda e interesante exposición de las principales biografías que se han publicado sobre el siniestro personajes, destacando los principales problemas que los historiadores ha intentado resolver para contribuir al conocimiento de esa etapa de la historia del siglo XX.
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Ofer, Dalia y Lenore J. Weitzman. Mujeres en el Holocausto. Fundamentos teóricos para un análisis de género del Holocausto. Traducción de Mónica Manssur. México, Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la UNAM, Plaza y Valdés, 2004. 114 p. (ed. bilingüe en español e inglés). En los años inmediatamente siguientes al Holocausto, pocos fueron quienes tuvieron ánimo para dejar plasmado sus testimonios del horror que les había tocado padecer. Sin embargo, con el pasar de los años y con las tentativas de fortalecer el olvido o de negar aquella deplorable experiencia humana, hubo muchas otras personas que han hecho un valeroso y valioso ejercicio de memoria para que aquello no sea borrado de la historia. Entre muchas de esas personas se encuentran varias mujeres, quienes han dado cuenta de la particular forma en que fueron tratadas a diferencia de los hombres. Esto ha permitido estudiar el periodo nazi desde la perspectiva de los estudios de género. De esa forma aquí se plantea el análisis de la vida de las mujeres desde la vida cotidiana y familiar, en la que tuvieron que ir ocupando los espacios de los hombres perseguidos, hasta las políticas de crueldad dirigidas específicamente a ellas, como los abortos forzados y la pena de muerte por embarazo, por ejemplo.
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Roberts, Andrew. Hitler y Churchill. Los secretos del liderazgo. Traducción de Amado Diéguez Rodríguez. México, Taurus, 2005. 309 p. La Segunda Guerra Mundial también significó el enfrentamiento directo entre dos de los más notables pastores de hombres de la historia: por una parte, el alemán Adolf Hitler, y por la otra el inglés Winston Churchill. Ambos encabezaron los esfuerzos de sus pueblos por ganar la contienda, desplegando de manera formidable todas sus dotes de liderazgo, a tal grado que hasta la fecha siguen siendo motivo de estudio y de debate. En este libro se analizan y comparan la naturaleza y el ejercicio del liderazgo en la actuación de ambos personajes, poniendo especial atención en su discurso para "examinar cómo dos personajes completamente opuestos esgrimieron, cada uno a su modo, ese léxico básico, a fin de obtener el premio que, como ambos sabían, sólo uno de los dos podía lograr: la victoria en la Segunda Guerra Mundial".
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Steinert, Marlis. Hitler y el universo hitleriano. Traducción de Amanda Foros de Gioia. Barcelona, Ediciones B, 2004. 707 p. (Col. Biografía e historia). A Adolfo Hitler se le han dedicado muchos trabajos biográficos que han intentado dar cuenta de las motivaciones que lo llevaron a cometer la bárbara obra tarea de construcción de un Reich de mil años. En los años noventa del siglo pasado vio la luz uno de los intentos más logrados y actualizados (por la aparición de nuevas fuentes y la introducción de flamantes métodos) por relatar y entender de forma distinta la vida del Führer, logrando aclarar la relación existente entre la persona del dictador y su contexto histórico. De esa forma la historiadora nos presenta no sólo la narración de la existencia de Hitler, sino que presenta una interpretación muy amplia del fenómeno hitleriano; es decir, "un personaje representativo de su época, que tradujo y engrosó las características de esta última". De su extenso estudio se puede concluir que Hitler fue producto y productor de la sociedad, la ideología y la cultura política de Alemania: "Hitler fue el producto de las convulsiones y de las frustraciones de la historia austroalemana, de la historia de un pueblo al que le costaba integrarse. Sin ellas, ese representante por excelencia de la 'trivialidad del mal' (Hannah Arendt) jamás podría haberse elevado a la cabeza de la nación. A su vez, Hitler marcó con su sello a la sociedad y la cultura política del III Reich." De esa relación indisociable surgió un cataclismo sin parangón en la historia.
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